Mijail kuzmin Poema canción. El viaje de la virgen a través del tormento.

Murió en Siberia Mijail kuzmin Poema canción. El viaje de la virgen a través del tormento La Purísima subió a la alta montaña, Ella vio al Purísimo Miguel Arcángel, La Purísima dijo a Miguel Arcángel: “Tú eres el brillante, brillante Miguel Arcángel, Llévame a ver Todo tormento humano, Cómo son atormentados los pecadores, que no supieron de Dios, que se olvidaron de Cristo, que realizaron lo malo.” Condujo el purísimo Arcángel Miguel por todos los tormentos por todos los martirios: En el infierno de fuego, en la oscuridad total en el fuego que no duerme, en el río de fuego. Que en el norte de trigo y en el sur, en el este del sol y en el oeste. La Virgen vio todos los tormentos humanos, cómo son atormentados los pecadores, que no conocieron a Dios, que se olvidaron de Cristo, que hicieron el mal: Príncipes, sacerdotes y niños mundanos, Que no fueron a la iglesia, no leyeron y no escucharon los libros sagrados, despertaron maitines, bebieron vísperas, fornicaron con padrinos, expulsaron a los pobres, no aceptaron a los extraños, borrachos, granjeros, bufones, sacerdotes holgazanes, despiadados, despiadados, Todos sus hechos tacaños y malvados realizados. Como la Pura veía todos los tormentos humanos, lloraba, sollozaba y decía a los pecadores: “Pobres, pobres pecadores, pobres, desgraciados, mejor sería que no nacierais, yo el luminoso Michael Archangel, arrojarme quiero a la ardiente Gehenna: quiero sufrir con los pecadores hijos de Dios. Dijo el Purísimo Arcángel Miguel: “¡La Señora de la Madre de Dios, mi Señora Luminosísima! Tu misión es descansar en el paraíso, y que los pecadores hiervan en el infierno, te ruego Reina Madre que li pidas a tu Hijo, Jesucristo, el Unigénito, que tenga misericordia de los pecadores. El Señor de la Madre de Dios no escuchó, no tuvo misericordia de los pecadores, Y de nuevo el Purísimo oró: “¿Dónde estáis, profetas, apóstoles, Dónde estáis, Moisés el vidente de Dios, Daniel con tres jóvenes, Iván el Teólogo, amado de Cristo, ¿Dónde estás, San Nicolás, viernes de belleza cristiana? ¡Apóyense en el Señor, que Él tenga misericordia de los pecadores! El Señor de la Madre de Dios no escuchó, no tuvo misericordia de los pecadores, y la tercera vez el Purísimo exclamó: “¿Dónde estás, poder celestial? Ángeles y arcángeles, querubines y serafines, ¿dónde estáis? Miguel Archangel, aullido del cielo? ¡Apóyense en el Señor, que Él tenga misericordia de los pecadores! Y todos los santos ángeles, Profetas, apóstoles, Iván el Teólogo, el amado de Cristo, Viernes, belleza cristiana, cayeron, - Y la altura celestial gimió De su llanto-sollozo. Y el Señor Misericordioso los escuchó, Y se compadeció de los pecadores: Les dio paz y alegría Desde el Jueves Santo hasta el Santo Pentecostés. Querubines y serafines, ¿Dónde estás, Miguel Arcángel aullido del cielo? ¡Apóyense en el Señor, que Él tenga misericordia de los pecadores! Y todos los santos ángeles, Profetas, apóstoles, Iván el Teólogo, el amado de Cristo, Viernes, belleza cristiana, cayeron, - Y la altura celestial gimió De su llanto-sollozo. Y el Señor Misericordioso los escuchó, Y se compadeció de los pecadores: Les dio paz y alegría Desde el Jueves Santo hasta el Santo Pentecostés. Querubines y serafines, ¿Dónde estás, Michael Arcángel aullido del cielo? ¡Apóyense en el Señor, que Él tenga misericordia de los pecadores! Y todos los santos ángeles, Profetas, apóstoles, Iván el Teólogo, el amante de Cristo, Viernes, hermosura cristiana, cayeron al suelo, Y la altura celestial gimió De su llanto sollozo. Y el Señor Misericordioso los escuchó, Y se compadeció de los pecadores: Les dio paz y alegría Desde el Jueves Santo hasta el Santo Pentecostés.