Tienen un ejercito de brillantes guionistas que trabajan para ellos y que son seguidores de los mejores escritores de la edad de oro de la ciencia ficción y la opereta espacial, los relatos de la nueva visión de scientifiction y la proto ciencia ficción crearon ingeniosas obras cuyo tema central esta basado tanto en lo religioso como lo espiritual, y una gran influencia indirecta en el campo militar, y muchos eran auténticos especialistas en la industria biotecnológica y farmacéutica.
La relevancia cultural de este género tiene su auge en el periodo de los años treinta hasta bien entrado los años sesenta del siglo pasado y sus ingeniosas obras, afectaron tanto a la psique de los jóvenes estadounidenses que se hizo un estudio psiquiátrico que decía que la obra de John A. Keel, -el Hombre Polilla- y las novelas de Cyril Kornbluth, el Cántico de Leibowitz de Miller, Crónicas marcianas de Bradbury, El fin de la infancia de Clarke, A Case of Conscience de Blish y la legión de escritores que surgieron en esa época alteraron la conciencia y la imaginación de millones de jóvenes, muchos de los jóvenes que los leían ayudaban a su fantasía con el consumo de sustancias psicotrópicas y el LSD. Los sanatorios de salud mental se inundaron de obsesos y paranoicos.
Todos los discípulos de estos novelistas ahora trabajan para la CIA el instituto Tavistock y Hollywood documentando películas y artículos que inundan las redes con escritos y noticias relámpago, relatos que no da tiempo para la asimilación consciente, (ejemplo contraperiodismo matrix) ¿quién de los seguidores de esta revista recuerda el penúltimo artículo que haya escrito? nadie; porque esa no es la finalidad, se escriben y se publican esos artículos a una velocidad de vértigo, no se escriben para la mente consciente racional y concreta, están dirigidos al subconsciente a través del inconsciente, la mente consciente no asimila nada, porque el desaliento, la desmoralización y la destrucción de la fe es la finalidad y propósito de estas revistas. Una manera muy sofisticada de crear millones de seres sin espíritu fácilmente manipulables.
Los artículos y la contrainformación que publican estas revistas no dejan espacio para la reflexión, el seguimiento racional es practicamente imposible al no poder ser verificados debidos a que son vertiginosos. La atención que yo muestro sobre estas redes y foros conspioranóicos me tienen fascisnado, no por lo que en ellas escriben, si no por la cantidad de seguidores que tienen, una manera de tomar el pulso a la salud mental del planeta.
En el siglo XIX, en Londres se puso de moda un personaje por las supuestas apariciones que aterrorizaron por aquellos días a muchos londinenses, le pusieron el nombre de Jack el Saltarín, en la actualidad los amigos de lo fantástico tratan de actualizarlo en el escenario fantástico conspiranóico.
En el siglo XIX, en Londres se puso de moda un personaje por las supuestas apariciones que aterrorizaron por aquellos días a muchos londinenses, le pusieron el nombre de Jack el Saltarín, en la actualidad los amigos de lo fantástico tratan de actualizarlo en el escenario fantástico conspiranóico.